miércoles, 28 de diciembre de 2016

TRANSFORMACIÓN DE JOYAS CON HISTORIA. CAPITULO 1: EL ANILLO DE GIADA

Con el año tocando a su fin y al hacer un poco de balance de lo que ha representado 2016, hemos caído en la cuenta de que, una de las cosas que más nos han gustado ha sido TRANSFORMAR en JOYA ACTUAL antiguas alhajas que para nuestros clientes tienen una potente carga simbólica, bien por un recuerdo de alguna circunstancia de sus vidas o por pertenecer a sus seres más allegados y queridos que ahora ya no están. La carga emocional de la historia que hay detrás de las joyas que hemos transformado, nos ha impactado tanto que hemos creído, siempre de acuerdo con la persona protagonista, iniciar una serie en nuestro blog para contarlas y compartirlas con todos vosotros. En nuestro primer capítulo queremos contaros la historia del ANILLO DE GIADA.







































Pietro y Mª Rosaria, se conocieron de muy jovencitos en el pueblecito de Ussaramanna, en su Cerdeña Natal, el día de San Lorenzo e inmediatamente se enamoraron. Él, trabajaba y vivía en Milan, pero sus profundas raíces sardas hacían que cada año decidiera pasar unos días en su pueblo. Un año después de conocerse, ella dejó todos sus estudios para mudarse con él a la capital lombarda. Se casaron y en las navidades posteriores, MªRosaria le regaló a su marido una cadena con una placa del Sagrado Corazón. Fruto de su amor tuvieron un tesoro hace ya 29 años, llamado GIADA. Años después sus vidas se separaron, aunque en el recuerdo de su hija siempre está el de una madre excelente y el de un padre ejemplar que siempre cuidó de ella hasta el punto de irse a vivir con él. Pero Pietro siempre quedó unido a su primer amor con ese collar y su placa que llevaba consigo puesta a todas partes, incluso a las playas de su tierra sarda dónde regresaba siempre para pasar las vacaciones. Por desgracia, una cruel enfermedad se lo llevó hace ya dos años dejando en Giada un montón de enseñanzas y un innumerable sinfín de recuerdos. Entre ellos, esa joya tan preciada que, de alguna forma, ella quería transformar para llevar una de su estilo que le recordara siempre a su padre. Fue entonces cuando decidió acudir a nosotros.






























La idea de Giada era la de aprovechar la placa de Pietro para integrarla en un anillo en forma de plataforma del mismo y elegir la piedra apropiada para poder visualizar al máximo la base. Finalmente la elección fue un elegante cuarzo lodolita ahumado que permitía tener una visión amplia del interior, cosa que aprovechamos para grabar el nombre de su progenitor en la parte superior para que con disimulo pudiera apreciarse, como estableciendo un vínculo de complicidad padre-hija.




















La estructura del anillo (boca y brazo) está realizado en plata, pues el blanco es el color preferente de su destinataria, pero rodeando el marco superior con una plancha de oro de 18 quilates a juego con el color de la piedra y la base del anillo. El detalle viene en la parte posterior en la que el Sagrado Corazón de la placa hace de sustento en el dedo simbolizando un contacto permanente entre Giada y Pietro.


Ha sido un placer haber participado en esta emotiva historia y haber contribuido a transformar un sueño en una realidad. Muchas gracias Giada, por hacernos partícipes y por haber aceptado participar en este proyecto que nos ilusiona: compartir la historia de las joyas que transformamos.